
Esa que transmitías apenas aparecías en cualquier lugar, esa que de manera terrible te quitaron y nos quitaron a todos los que te queremos.
¡Fuimos tan felices cuando Abril se anuncio!... Como y cuanto soñabas con ser mama... pero sabes Mari, hay "gente" si se puede llamar así, que se encarga por negligencia y abandono hacer daño, lastimar, herir y mucho mas... nuca vamos a entender por que "esa gente" se cruzo en tu camino y en el de Abril, también de alguna manera en el camino de todos nosotros.
Nos robo y nos mato la dicha de acompañarte en ese momento tan próximo y hermoso. Lamentablemente, si hizo que te acompañaramos ese 22 de diciembre de madrugada, tus dolores, tu sufrimiento y tus miedos, porque nadie te atendió adecuadamente.
Todos nosotros pedíamos entre rezos y lágrimas que no sea nada grave. Y tuvo que llegar la urgencia del 23, el terrible, incomprensible y doloroso desenlace ¡Cuanto dolor!!
Pero Dios, siempre se encarga en definitiva de que las cosas sean como El quiere y nunca deja solo a ninguno de sus hijos ¡Nunca te dejo sola Mari!!!...
Las noticias son veloces, transcienden nuestra ciudad. Muchos creen que "eso no es bueno", sin embargo, para nosotros "si lo es" porque sos un alerta en muchos sanatorios, inclusive de Capital Federal, para que esto no vuelva a pasar...
¡Gracias Mariana, por entregar tu vida como lo hizo El para salvar a otros!!!